Para esos días donde el viento de levante o poniente sopla fuerte, hay que prestar especial atención a la costa norte de Conil, concretamente a sus calas. Ellas serán las encargadas de resguardarnos de estos caprichosos vientos y poder disfrutar de un agradable baño.

Las calas de Conil, refugio en días de viento

Las calas se encuentran divididas dependiendo del tipo de viento. Las de poniente son aquellas situadas entre el término municipal de Chiclana hasta el puerto pesquero de Conil y las de levante son las que continúan hasta la playa Fuente del Gallo. Con estas premisas ya sabremos hacia dónde dirigirnos según el viento, ahora queda saber un poco más de cada una para que planeéis vuestro día.

Las calas de Roche que se encuentran habilitadas se dividen en cala Tío Juan de Medina: bastante amplia y de fácil acceso. Es idónea para nudistas debido a su poca afluencia; cala del Aspero: está justo frente al hotel Confortel y se caracteriza por sus rocas en medio de la arena. Tiene bastante arena por lo que se forman menos aglomeraciones que en las demás; cala del Pato: se accede a través de un camino de madera entre el follaje y bajando por una escalera.

Recibe su nombre por la forma que tiene su roca saliente visible desde arriba del acantilado; y por último, cala del Frailecillo: es más amplia que las anteriores y por tanto, bastante frecuentada. Para llegar deberéis de bajar una angosta escalera de piedra.

Éstas calas conocidas tanto como calas de Roche como calas de Poniente se caracterizan por sus acantilados de roca rojiza que les brinda un encanto único. Tampoco nos debemos de olvidar de sus aguas cristalinas y de poca profundidad, ideal para que disfruten los más pequeños.

Para llegar deberéis de aparcar en unas zonas habilitadas a unos metros de las mismas. Os aconsejamos que para los días de fuerte viento lleguéis con tiempo, sobre todo si se trata de un domingo, ya que puede ser que tengáis que buscar aparcamiento un poco más lejos.

Si sopla el levante: la Cala del Aceite

Si por el contrario, el viento que sopla es el de levante, deberéis de dirigíos a la famosa cala del Aceite. Su notoriedad se debe a que es la cala más grande de Conil y también una con mayor belleza. Es la única que cuenta con un chiringuito y la que tiene mejor acceso ya que sólo deberéis de bajar por una cuesta, lo que la hace accesible para minusválidos. También cuenta con una escalera. Tiene bastantes rocas, así que os aconsejamos a que esperéis a que baje la marea para visualizarlas y así poder daros un baño sin peligro.

Lo mejor, contemplar el atardecer desde su orilla, una imagen que podréis retener en vuestras cámaras de fotos.